27 Nov
27Nov

La vida del pelo tiene sus ciclos y se sabe que cada uno de nuestros cabellos pasa por 3 ciclos sucesivos de forma independiente. El cabello comienza directamente en la fase de crecimiento, que dura por término medio 3 años. Una vez que finaliza esta fase entra en la fase de reposo, que dura alrededor de 3 semanas y en ellas el pelo ya no crece más, para finalizar en la fase de caída, que dura de media 3 meses y es cuando el pelo finalmente cae. Es más fácil que el pelo en esta fase caiga cuando se somete a algún estrés, es decir, cuando nos lavamos el pelo o lo cepillamos. Una vez ha caído el pelo vuelve a salir un pelo nuevo del folículo piloso que comienza su primera fase de crecimiento. En cada folículo piloso pueden existir hasta 20 ciclos diferentes.

Es interesante que cada uno de nuestros pelos tiene sus propios ciclos independientes….¿os imagináis que siguieran todos los ciclos al mismo ritmo? ¡de repente se caerían todos a la vez!

La caída del pelo muchas veces está acompañada de pelo más fino, frágil y desvitalizado. Puedes notar también tu pelo más fino y graso que de costumbre.

¿Qué es lo que ocurre si se te cae pelo en exceso?

 

La caída excesiva del pelo supone una interrupción de los ciclos normales del pelo. Si normalmente se caen de forma natural hasta 80 cabellos al día las personas que sufren de alopecia o caída excesiva pueden perder hasta 1000. En estos casos la fase de crecimiento disminuye y aumenta la de reposo y caída.

¿Qué es lo primero que tengo que hacer si noto una caída excesiva de pelo?

Antes de pensar en una posible alopecia o comenzar ningún tratamiento es importante comprobar el estado de tu cuero cabelludo. La caída del pelo puede deberse a problemas locales, como por ejemplo una infección por hongos en el cuero cabelludo. También hay que descartar otras enfermedades como lupus eritematoso. Si notas el cuero cabelludo irritado, enrojecido o con heridas, consulta con tu médico. Esto es válido tanto para hombres como para mujeres.

Causas de la caída del pelo

 

Las principales causas de caída del pelo son las siguientes:

Hereditarias: es una de las causas más frecuentes, también se llama androgénica o androgenética y está relacionada con los niveles hormoales. En los hombres hasta el 70% la padece. Es típico que la caída del pelo sea más acusada en la región de la coronilla, así como en el nacimiento del pelo en la frente y sienes (las famosas “entradas”). En algunos casos puede empezar hasta a los 18 años. Si eres mujer puedes heredarlo de tus familiares mujeres pero incluso también de los hombres.

Medicamentos: existen medicamentos que tienen como efecto secundario la caída del pelo. Los más comunes pueden ser algunos antidepresivos, beta-bloqueantes, hormonas, medicamentos para bajar los niveles de colesterol o algunos antiinflamatorios. Por supuesto, que el medicamento que estás utilizando tenga entre sus efectos secundarios la caída del pelo no quiere decir que a ti vaya a ocurrirte, puede ser solo a un pequeño porcentaje de la población. Por eso, si se te cae el pelo de forma mantenida en el tiempo acude a tu farmacéutico con la lista de los tratamientos que estás tomando para que pueda aconsejarte.

Estrés: junto con las cusas genéticas el estrés es una de las causas más frecuentes. El cuerpo sometido a estrés paraliza algunas de las funciones corporales no imprescindibles, como por ejemplo el crecimiento del pelo. Es un mecanismo de defensa de nuestro cuerpo para asegurarse que las funciones vitales no se ven afectadas. El estrés no es solo estrés emocional, existen otras causas que suponen un elevado estrés para nuestro cuerpo como el parto, una intervención quirúrgica, padecer una enfermedad importante o convalencencia o sufrir cambios drásticos de peso (sobre todo grandes pérdidas de peso).

Cambio de estación: es verdad que la caída del pelo es más acusada en estos meses otoñales. Esto se debe a que un mayor número de cabellos entran en a fase de caída en primavera (recordamos  que esta fase dura 3 meses), y también que durante el verano el cabello se ve inevitablemente más dañado: sol, mayor sudoración, playas, piscinas, etc.

Agresiones externas: por ejemplo profesiones que impliquen llevar casco, agresiones químicas (utilizar champús o productos agresivos o inadecuados), contaminación, utilizar secados con aire demasiado caliente, etc.

Dietas desequilibradas: La carencia de determinadas vitaminas y minerales es también causa de caída del pelo. Fundamentalmente suele deberse a falta de hierro, silicio, vitaminas del grupo B, Zinc, ácidos grasos esenciales, aminoácidos azufrados y oligoelementos.

Estos son los principales factores que contribuyen a la caída del pelo. En próximos post continuaré con este tema, ¡creo que interesa a mucha gente! Siempre es importante conocer de qué estamos hablando y contar con el consejo de un profesional sanitario que sepa valorar tu caso en particular. Por eso, si notas una caída excesiva del pelo, consulta siempre a tu médico, dermatólogo o farmacéutico que podrá ayudarte a resolver tu problema.

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